9 consejos para mejorar la concentración de los niños

Mejorar la concentración de los niños pasa por adquirir la habilidad de centrar su mente en la actividad que están llevando a cabo. Con estos 9 consejos prácticos te ayudaremos a mejorar la concentración de los niños: desde juegos divertidos a hábitos saludables.

Mejorar la concentración de los niños es imprescindible para que se produzca el aprendizaje. La mayoría de los niños se despista con facilidad, y esto dificulta su aprendizaje y afecta a su vida diaria. Mejorar la concentración de los niños pasa por adquirir la habilidad de centrar su mente en la actividad que están llevando a cabo. Por ello, a continuación os damos algunas herramientas y consejos prácticos educativos para mejorar la concentración de los niños. ¡Prueba con estas estrategias! Y la dificultad para concentrarse dejará de ser un desafío. 

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Descansa para ganar concentración

No hay que olvidarse de la importancia de dormir bien por la noche para evitar los problemas de atención en los niños. Sin embargo, además de los descansos nocturnos, tampoco hay que olvidarse de las siestas cortas y de los descansos entre horas. Lo ideal para mejorar la concentración de los niños sería establecer como rutina diaria unos descansos de aproximadamente veinte minutos, ya sea por la tarde o después del colegio. Y, por la noche, lo ideal sería acostar al niño a las 9 de la noche como muy tarde.

Por otra parte, la concentración siempre disminuye después de un rato intenso de estudio. Así que… ¡un aplauso para las paradas periódicas! Son una brisa de aire fresco para la mente y la concentración.

Dieta equilibrada

Uno de los primeros consejos para mejorar la concentración de los niños es incluir alimentos saludables en su dieta. Tener una dieta equilibrada es esencial en la etapa de crecimiento, ya que, además de influir en su salud y peso corporal, también tiene un efecto directo en sus niveles de energía y habilidades de concentración. De todas formas, según los expertos, algunos de los alimentos que contribuyen más a la concentración son el plátano, la mantequilla de cacahuete, el yogur, los huevos, la avena y el chocolate.

Otra pauta vital para mejorar la concentración de los niños consiste en beber suficiente agua, puesto que la deshidratación afecta negativamente al cerebro del pequeño y, por lo tanto, a su concentración.

Calendario de estudio

Otro consejo sencillo para mejorar la concentración de los niños es colgar un calendario de estudio o cronograma en la pared. Esta técnica de estudio consiste en un horario organizado donde constan todas las horas dedicadas para estudiar (o realizar tareas), y también un tiempo asignado para cada tarea o asignatura. 

En esta misma línea, también nos puede ayudar seguir unas pautas cromáticas, pues los colores pueden influir en los quehaceres diarios.

Hábitos de escucha concentrada

Oír no es escuchar. De hecho, según la RAE, escuchar significa «prestar atención a lo que se oye», mientras que oír es simplemente «percibir con el oído los sonidos». De esta forma, practicar la escucha activa es otra manera de prestar atención y mejorar la concentración de los niños. Requiere una serie de habilidades que se pueden entrenar, así como la atención, participación, empatía y concentración. 

A modo de ejemplo, un ejercicio para conseguir estos hábitos de escucha sería colocar un tablero en la pared de clase con este tipo de mensajes:

  • «No se puede interrumpir ni tampoco juzgar a la persona que habla».
  • «Levanto la mano si quiero hacer una pregunta o añadir algún comentario».
  • «Escucho cuando me hablan». 

Dibujos y música para la concentración

Por un lado, la música y la pintura son dos expresiones artísticas que tienen numerables beneficios a la hora de mejorar la concentración de los niños. Entre ellos, estimula su concentración, coordinación, comunicación, autoestima y creatividad. Por otro lado, dibujar o poner música de fondo también son una buena opción para que aprendan algunos valores y empiecen a tener un criterio propio.

Desde VOCA Editorial te aconsejamos los audiocuentos, los materiales para dibujar o pintar (lápices de colores, brochas y rotuladores), los musicales y las canciones infantiles para fomentar su imaginación, relajación, expresión y concentración. 

 

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Entorno de concentración

Cuando existen dificultades para mantener la concentración, es básico crear un entorno propicio para la actividad que va a realizar el niño. Algunos estudios recomiendan tener un espacio iluminado, aireado y sin ruidos para mejorar la concentración de los niños. Así mismo, es importante que esta zona siempre sea la misma para que los niños la asocien con su zona de concentración.

El ajedrez

El ajedrez es una buena alternativa para aquellos que deseen mejorar la concentración de los niños, además de su memoria, creatividad y lógica. Otro de los beneficios es la mejora del rendimiento académico. En otros artículos ya hemos hablado de juegos para mejorar la atención y potenciar las emociones positivas del niño. Quizás te interese leer al respecto. 

Límites con los videojuegos y apps

Según los psicólogos, los videojuegos y otros dispositivos móviles tienen efectos dañinos para la concentración de los pequeños. En realidad, un empleo descontrolado de estos aparatos distractores puede suponer un desorden grave en su vida, además de potenciar el individualismo. Por ello, a la hora de mejorar la concentración de los niños sería bueno limitar el tiempo de este tipo de actividades. 

Un uso excesivo puede llegar al extremo de que su vida gire en torno al videojuego. Pasar del mundo real a encerrarse en el virtual cada vez es más sencillo. Hay que poner unos límites.

Otras pautas educativas para favorecer la concentración

Hasta ahora hemos comentado los consejos más básicos para mejorar la concentración de los niños. Veamos brevemente otras pautas educativas

  • Mantener el contacto visual con el niño al explicarle algo.
  • Que se centre en una sola tarea y que, al hacerlo, divida la actividad en partes. Seleccionar las partes importantes le ayudará a recuperar la atención. 
  • Ser paciente y felicitarle cuando ha mantenido la atención, para que vea que es capaz de hacerlo bien si se lo propone.
  • Establecer objetivos a corto plazo, como, por ejemplo, sugerirles que se aprendan una tabla de multiplicar en un intervalo de una hora. Es una forma de mejorar la concentración de los niños a través de la motivación de superar pequeños retos. 

Si te ha resultado útil este post sobre consejos para mejorar la concentración de los niños, puede que te sirva este otro artículo sobre cómo detectar y tratar el TDAH. ¡Gracias por leernos! ¡Y suscríbete a nuestro blog!

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